Ganó el mejor puesto (83-65)
Odilo FC Cartagena CB desbanca al Tizona Burgos de la séptima plaza en un partido que comenzó con malos principios locales y recital visitante (16-29), para en el segundo cuarto igualarse y quedar sentenciado al acabar el tercero merced a un conjunto cartagenero que, pese a los fallos en el tiro libre, fue a más mientras que los burgaleses se iban quedando sin 'filo'. Ahora, disputar la fase de ascenso a la ACB está muy a tiro, pues podría bastar con una victoria más.
Palacio de Deportes de Cartagena. Partido de la jornada 31 de Primera FEB de baloncesto disputado ante unas mil quinientas personas.
PARCIALES y MARCADOR CADA 5 MINUTOS. 16-29, 43-43 (27-14), 69-56 (26-13) y 83-65 (14-9).
Segunda victoria consecutiva del Odilo para alegrar unos días felices, pues el sábado aseguraba su permanencia en la categoría de plata del baloncesto español y ahora tiene cerca conseguir la disputa de la fase de ascenso a la Liga ACB, toda una gesta para un equipo novato y humilde, como refleja su presupuesto, que no su ambición.
Ahora, el conjunto que prepara Jordi Juste es séptimo, el mejor puesto saboreado esta temporada después de desbancar al Grupo Ureta Tizona Burgos por 18 puntos de diferencia, bastantes más de los 7 que hubo en la victoria burgalesa de la primera vuelta (103-96). Quedan 3 jornadas y con 1 victoria más se habrá logrado ese sueño.Vamos al partido, que, como todos, fue el resultado de los méritos del vencedor y deméritos del derrotado, como le pasó al Tizona, que fue perdiendo mucho filo en su espada anotadora con el paso de los minutos, como refleja que los 29 puntos del primer cuarto fue casi la misma cifra conseguida en los 3 restantes, incluida la testimonial última canasta del partido mientras sonaba la bocina. Por su parte, Odilo fue mejorando y logró una holgada victoria al ser bastante ser mejor en las canastas de 2 puntos (68% frente al 32%), mientras que estuvo flojo en los triples (5/24) y muy mal en los tiros libres, con un porcentaje de acierto casi de minibásket (50%) al fallar casi tantos como anotó (15 y 16, respectivamente). En el rebote hubo equilibrio y sí destacó su mejoría defensiva sobre pilares del rival, como el marcaje a Lobo, quien en los primeros 16 minutos había anotado 15 puntos y después sólo hizo 2.
Y ahora vamos por el relato cronológico. Juste, el entrenador de los 'caballeros negros', había advertido en la previa de la importancia del rebote ofensivo en un partido entre dos equipos que tiran mucho. Pues bien, una cosa es la teoría y otra la práctica, ya que en la primera jugada hubo captura visitante con triple. Los de Burgos ya no dejarían del marcador en estos 10 minutos y cuando Odilo espabiló en el rebote y empató (12-12 tras parcial de 8-0), apareció Lobo para anotar un triple con tiro adicional que resultó un mazazo. El acierto desde la línea de 6,25 metros de los visitantes y el problema local con los tiros libres y los triples derivó en 13 puntos de distancia al intermedio, pero, sobre todo, 29 puntos encajados. Demasiados.
El tiro era el problema local y hubo lanzamientos que nada más salir el balón de la mano ya se veía claro que no tocarían red. Hubo momentos delicados, como cuando se anotó el primero de los únicos triples locales de este acto y el rival respondió con dos iguales seguidos (23-35). Sin embargo, esta plantilla no sabe bajar los brazos y siguió adelante con un Blat muy inspirado en este tramo (8 puntos), que firmó un 'viaje meteórico' de costa a costa que encendió al público, que luego se motivó más con los errores visitantes, uno en el saque bajo su canasta y otro a agotar los 24 segundos en ataque sin tirar. El marcador se apretó con 32-35 y entonces el inspirado Lobo anotó un triple, pero los locales ya estaban en la onda. Jordan Rogers firmó el empate (38-38) y el 41-40 (primera ventaja local) con uno de los escasos acierto lejanos. Sucedió un 41-43 y el empate antes del intermedio que puso Ugochukwu ('Ugo').
Y llegó la sentencia, quedando en anecdótico que los de Burgos comenzasen el tercer cuarto con 43-47, pues pronto se convirtió en 57-51, poniendo esa primera diferencia cartagenera notable del partido una canasta con tiro adicional de Alberto y un triple de Jordan, obligando al 'tiempo muerto' de Salva Camps, técnico burgalés. En esta fase llegaron los tres triples locales restantes del partido (Jordan, Garuba y Alberto), además de dos 'mates' seguidos de Dylan, con lo que los aficionados blanquinegros tuvieron los momentos más vibrantes del encuentro, los que más les hicieron disfrutar. El mal seguía estando en el tiro libre, pero es que Tizona ya ni 'pinchaba'.
Ahí debió acabarse el partido, pues la diferencia ya superaba a la obtenida por Burgos en la primera vuelta y el público estaba vibrando, pero el reglamento dice que hay que jugar los cuatro cuartos y se afrontó un último que resultó un recital de despropósitos por ambos, además de jugarse con muchos parones, lo que de espectáculo tuvieron poco esos diez minutos. El parcial lo dice todo: 14-9. Odilo anotó menos puntos que en el primer cuarto, cuando iba perdiendo con claridad. Por su parte, me dio la sensación que el último intento de cambiar la situación de Tizona fue provocar faltas (una se le sancionó 'intencionada') al ver la nulidad en el tiro libre local, pero es que ellos estaban peor en puntería e inspiración, pues iban como 'pollo sin cabeza' tras el aro. Esta recta final sólo vale para decir que la máxima ventaja local llegó a los 21 puntos con 81-60.
En la próxima jornada, Odilo FC Cartagena CB visita al Valladolid, cuarto por la cola con 5 victorias menos. En teoría, bastante asequible (ayer perdió en Oviedo por 105-69), pero también más peligroso, pues lucha por evitar el descenso. Después, el 2 de mayo, último partido como local en liga ante Oviedo para cerrar en tierras de Cantabria, siendo estos dos equipos también luchadores por no perder la categoría. Por cierto, 'el otro Burgos', San Pablo, ha conseguido en esta jornada el ascenso matemático a la Liga ACB y ahora sólo quedará definir la plaza por la que lucharán ocho equipos.
- CLASIFICACIÓN
Declaraciones de Jordi Juste y de Salva Camps tras el partido: