Nuestra gente de espíritu romero
Los hermanos María José, Isabel, Luisa y José Gabriel Carrión han cumplido diez años desde que se hicieron a cargo de la romería de Pozo Estrecho a la ermita de La Loma.
"Lo hicimos para salvaguardar esta tradición, que por entonces había sufrido vacíos y pretendíamos estabilizarla, como, pensamos, que se ha conseguido, siendo también importante la colaboración que aporta la empresa Mesatrans", indica este cuarteto de la saga Carrión, en el que una de las hermanas no pudo estar este pasado domingo al encontrarse en el norte de Europa por motivos laborales.
Expresan orgullosos que la romería se ha convertido "en, posiblemente, la más puntera de la comarca", como también reflejan las cifras del avituallamiento: 1.500 bocadillos, 800 empanadillas, 1.200 cervezas, 1.200 botellines de agua y 1.600 refrescos espumosos. También cubre este animoso equipo romero el gran arroz para ochocientos comensales, el concurso de cintas a caballo y los premios que ayer se estrenaron para jinetes y equinos al concluir el trayecto romero. En la foto posan con familiares y allegados, todos colaboradores para que la romería salga bien cada edición.
